Esta irreflexión me gusta mucho, la leí hace mucho tiempo y últimamente la he estado recordando, pero me costo bastante encontrarla, espero que les guste
Un monje apunto de ser asesinado solicitó a su verdugo una ultima voluntad. “¿Ves la rama de aquel árbol?”, le dijo. “Córtala con tu machete.” El asesino obedeció y la rama cargada de flores cayó al suelo. El monje le pidió entonces: “Ahora pégala para que vuelva a vivir y de frutos.” El criminal se quedo confundido sin poder cumplir la última voluntad del monje. Entonces este se incorporó y le habló muy fuerte a la cara: “¡Piensas que eres poderoso porque destruyes y matas, pero eso cualquier necio puede hacerlo; escúchame bien, si quieres de verdad ser grande, construye y salva…!”
que el que tenga oidos escuche...
Indiscutible verdad!!!
ResponderEliminarPero mucha gente cree lo contrario, que triste...